Un
nuevo informe procedente de la Academia Rusa de las Ciencias (RAS) que
anda circulando por el Kremlin el día de hoy, con referencia a la
violenta sacudida la semana pasada del lecho del Mar Noruego después de
haber sido impactado por un poderoso terremoto con magnitud de 6.2 a
una poca profundidad de 8.8 kilómetros (5.5 millas) señala que este
evento también causo un cambio “inesperado y rápido” del Polo Norte
magnético de casi 1,000 kilómetros (621 millas) que esos científicos
afirman que solo puede atribuirse a un planeta aún no identificado en
nuestro sistema solar confirmada su existencia hace poco por uno de los
mas destacados astrónomos del Observatorio Nacional de Brasil en Rio de
Janeiro.
Desconocido
para muchas personas, como lo informo el diario Londinense The
Independent, el Polo Norte Magnético se esta moviendo mas rápido que en
cualquier otra época en la historia de la humanidad, amenazando todo
desde la seguridad de los modernos sistemas de transporte hasta las
rutas de negación tradicionales de los animales migratorios.
Los
científicos dicen que el Norte Magnético, que por dos siglos ha estado
en las heladas regiones despobladas del Canadá, se esta reubicando
actualmente hacia Rusia a un ritmo de casi 40 millas al año. La
velocidad de su movimiento ha aumentado un tercio en la pasada década,
provocando especulaciones de que el campo pudiera estar a punto de
“voltearse” causando que se inviertan las brújulas y apunten hacia el
sur en lugar del norte, algo que sucede entre tres y siete veces cada
millón de años.
El
fenómeno ya esta causando problemas en el campo de la aviación. El
aeropuerto internacional de Tampa en Florida, se paso un mes el año
pasado renombrando sus tres pistas, que en común con las de la mayoría
de los aeropuertos Estadounidenses están identificadas usando números
que corresponden a la direccion, en grados, que indica la brújula.
“Todo tuvo que ser cambiado, fue un proyecto enorme”. Dijo Brenda
Geoghagan, una de las voceras del aeropuerto.
Los
científicos de la RAS en ese informe, también alertan que este rápido
cambio del Polo Norte aumentara la desestabilizacion de los sistemas
climáticos de nuestro planeta que ha causado la ocurrencia de
históricas sequías a nivel mundial, siendo las mas graves en los Estados
Unidos, México, América Central y las regiones boscosas del Amazonas
en el Brasil.
Confirmando
las conclusiones a las que llegaron los científicos de la RAS,
reporto el diario de Londres, The Daily Mail, la semana pasada que la
evidencia del “Planeta X”, el misterioso e hipotético planeta en los
confines de nuestro sistema solar – ha tomado un nuevo giro gracias a
las matemáticas del prestigiado astrónomo Rodney Gomes.
Rodney
Gomes, astrónomo del Observatorio Nacional de Brasil en Rió de
Janeiro, dice que las órbitas irregulares de pequeños cuerpos de hielo
mas allá de Neptuno implican que un planeta cuatro veces mas grande que
el tamaño de la Tierra esta girando alrededor de nuestro Sol en las
orillas de nuestro sistema solar.
El
Planeta X –mal nombrado, tal vez, ahora que Plutón ha sido degradado a
planeta enano – ha sido objeto de hipótesis durante décadas, pero nunca
ha podido comprobarse su existencia.
Gomes
midió las órbitas de 92 objetos del cinturón Kuiper – cuerpos pequeños
y planetas enanos – y dijo que seis objetos parecían ser jalados fuera
de su curso comparados con sus órbitas usuales. Les dijo a los
astrónomos de la Sociedad Astronomica Estadounidense el martes que la
razón mas probable de esas órbitas irregulares era un “compañero solar
de masa planetaria”, un cuerpo distante del tamaño de un planeta que es
lo suficientemente poderoso para mover los objetos del cinturón de
Kuiper.
También
sugirió que ese misterioso planeta tendría cuatro veces el tamaño de
la Tierra –alrededor del tamaño de Neptuno y estaría a 140 billones de
millas del sol o casi 1,500 veces mas lejos que la Tierra.
Aunque
Gomes pudiera, de hecho, encontrar al misterioso Planeta X, el no fue
el primero en sugerir que tal cuerpo estaría escondido detrás de
Neptuno, que es cuatro veces mas grande que la Tierra y que fue
descubierto en la década de 1840.
El
matemático Frances, Urbain Le Verrier uso la mecánica Newtoniana para
analizar las perturbaciones en la orbita de Urano y construyo la
hipotesis de que eran causadas por el jalón gravitacional de un planeta
aun no descubierto.Le Verrier predijo la posición de este nuevo planeta
y envío sus cálculos al astrónomo Aleman, Johann Gottfried Galle.
El 23
de septiembre de 1846, la noche siguiente a la recepción de la carta,
Galle y su estudiante Heinrich d’Arrest descubrieron Neptuno,
exactamente donde La Verrier lo había predicho. Ahí quedaron unas
ligeras discrepancias en las órbitas de los gigantes de gas. Estas
fueron tomadas para indicar la existencia de otro planeta orbitando mas
allá de Neptuno.
Es
interesante apuntar que estos “modernos” descubrimientos del Planeta X
hechos por los mas conocidos científicos coinciden exactamente con los
mitos y leyendas de los pueblos mas antiguos de nuestro planeta, como
los recogió el siglo pasado el erudito independiente y escritor
Estadounidense de origen Ruso, Immanuel Velikovsky, que los registro
todos en el, tal vez, mas controvertido libro del siglo 20 con el
titulo de “Mundos en Colision”.
En su
libro, Velikovsky propuso que alrededor del siglo 15 antes de Cristo,
Venus fue expulsado de Jupiter como cometa o un objeto tipo cometa,
que paso cerca de la Tierra (no se menciona una colisión verdadera). El
objeto cambio la órbita y el eje de la Tierra, causando innumerables
catástrofes que mas tarde fueron mencionadas en las primeras
mitologías y religiones alrededor del mundo.
Cincuenta
y dos años después, paso cerca de nuevo, deteniendo la rotacion de la
Tierra por un rato causando mas catástrofes, luego, en los siglos 8 y
7 antes de Cristo, Marte (el mismo desplazado por Venus) tuvo varios
acercamientos a la Tierra, causando este incidente una nueva ronda de
disturbios y desastres. Después de eso, se estableció el actual “orden
celestial”. Los cursos de los planetas se estabilizaron en el correr
de los siglos y Venus, gradualmente, se convirtió en un planeta
“normal”.
Lo
mas critico en señalar sobre los descubrimientos de Velikovsky entre
los mitos y leyendas antiguas fue la profecía de que lo que sucedió,
sucedería de nuevo y si se les va a creer, eso sucedería en la época de
nuestras vidas en el Siglo 21.
Según
esos antiguos mitos, el misterioso Planeta X (sobre el que los “dioses”
crearon a los humanos) aparecería de nuevo desde el Sur… “Las tierras
de la Cruz”. La “cruz” a la que se refieren los antiguos es la que se
conoce hoy en día como la Crux que es la mas pequeña de las 88
constelaciones modernas, pero que es una de las mas distintivas y se
puede ver únicamente desde el Hemisferio Sur. Su nombre en Latin
significa Cruz, y esta dominada por un asterismo en forma de cruz a la
que se le conoce comúnmente como la Cruz del Sur y aunque ahora esta
asociada al Cristianismo, es, de lejos, uno de los símbolos mas
antiguos y venerados de la Humanidad.
Es
interesante destacar que la semana pasada, se anuncio en Holanda que
tanto Australia como Sudafrica (ambos ubicados en el Hemisferio Sur)
compartirian la construccion el telescopio mas grande de la historia
conocido como Despliegue Kilometro Cuadrado que es una serie de 3,000
radio-telescopios conectados que rastrearan los cielos del sur y
tendran un costo estimado de $ 2 Billones de Dolares.
En lo
que respecta a que es lo que encontraran en los cielos del sur
referente al misterioso Planeta X, el consejo mas asombroso sobre que
es lo que darán a conocer al publico lo dio el columnista del New
York Times y ganador del Premio Nobel, Paul Krugman que pidió a los
extra-terrestres que invadieran la Tierra para que los gobiernos del
mundo gastaran dinero para montar una defensa, estimulando, con ello, la
economía. Y como lo cito directamente de Krugman durante su aparición
el año pasado en el programa Real Time de la HBO:
“Es
muy difícil hacer que la gente haga esto, mucho mejor, obviamente,
construir puentes y caminos, clínicas de salud publica y escuelas.Pero
lo que yo propuse, en realidad, es una propuesta seria que es que
obliguemos a muchos científicos a decirnos que estamos enfrentando una
invasión extra-terrestre y con el fin de estar preparados para esa
invasión tengamos que hacer cosas, como un tren de alta velocidad. Y,
una vez recuperados, podamos decir: “Miren, no hay extra-terrestres”.
En
cuanto a que si se comprobara que Krugman tiene razón y de que “no hay
extra-terrestres” o si se comprueba que los antiguos tienen la razón y
“algo maligno viene en camino”, honestamene nadie lo sabe, pero con toda
seguridad estamos a punto de saberlo muy pronto.
Fuente: Sorcha Faal
Y hablando del Astronomo de Brasil, salio su noticia en un diario de Inglaterra:
Astronomer insists there is a Planet X four times the size of Earth lurking at the edge of our solar system
- Distortion to orbits of asteroids beyond Pluto imply mystery planet is tugging at them, claims
The evidence for ‘Planet X’ – the
mysterious hypothesised planet on the edge of our solar system – has
taken a new turn thanks to the mathematics of a noted astronomer.
Rodney Gomes, an astronomer at the
National Observatory of Brazil in Rio de Janeiro, says the irregular
orbits of small icy bodies beyond Neptune imply that a planet four
times the size of Earth is swirling around our sun in the fringes of
the solar system.
Planet X – perhaps mis-named now that
Pluto has been demoted to a dwarf planet – has been widely hypothesised
for decade, but has never been proven.
Gomes measured the orbits of 92 Kuiper
belt objects – small bodies and dwarf planets – and said that six
objects appeared to be tugged off-course compared to their expected
orbits.
The hypothetical planet – four times the size of Earth – will float beyond Neptune and Pluto and cause disturbances in the Kuiper belt of asteroids.
He told astronomers at the American
Astronomical Society on Tuesday that the most likely reason for the
irregular orbits was a ‘planetary-mass solar companion’ – a distant
body of planet size that is powerful enough to move the Kuiper belt
objects.
He suggested the planet would be four
times bigger than Earth – around the size of Nepture and would be 140
billion miles from the sun, or about 1,500 times further than the
Earth.
Alternatively an object the size of
Mars on an irregular orbit that bought it to within five billion miles
of the sun – close to Neptune’s orbit – could be the solution.
However, due to the distances
involved, it will be tough to for Earthbound astronomers to catch a
glimpse of the hypothetical newest member of our solar system.
Even non-planet Pluto is hard to spot thanks to the distances involved.
The Kuiper belt lies on the outskirts of our solar system, and calculations imply a planet also lurks out there
The solar system as we know it, showing (l-r), Mercury, Venus, Earth, Mars, Jupiter, Saturn, Uranus and Neptune
While other astronomers are on the astronomical fence, they have applauded his methods.
Rory Barnes, from the University of
Washington told National Geographic that Gomes ‘has laid out a way to
determine how such a planet could sculpt parts of our solar system.
‘So while, yes, the evidence doesn’t
exist yet, I thought the bigger point was that he showed us that there
are ways to find that evidence.
‘I don’t think he really has any evidence that suggests it is out there.’
Hal Levison, from the Southwest
Research Institute in Boulder, Colorado, said: ‘It seems surprising to
me that a [solar] companion as small as Neptune could have the effect
he sees.
‘[But] I know Rodney, and I’m sure he did the calculations right.’
The previous ninth planet, Pluto, is one of the largest of the Kuiper belt dwarf planets, at some 1,400 miles wide.
It got downgraded by the International
Astronomical Union in 2006 for failing to meet all the criteria of a
‘planet’, namely that its mass is not sufficient enough to clear its
orbit of surrounding objects.
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